miércoles, 26 de diciembre de 2007

IGLESIA DEL SALVADOR DE SEVILLA

IGESIA DEL SALVADOR II
Esta segunda visita, no es realizada al templo en obras como la del año pasado. Ahora se trata de conocer gran parte de los bienes muebles que se muestran en una exposición instalada en la Sala de Exposiciones del Real Alcázar de Sevilla, que se llama El Salvador en el IAPH ( Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico). La ubicación del IAPH la conocimos el año pasado en el interior del recinto de La Cartuja de Santa María de las Cuevas que no pudimos visitar en aquella ocasión.
Esta muestra es de duración limitada al nueve de diciembre, ya que se pretende abrir la Iglesia el día cuatro de marzo de 2008, fecha del quinto aniversario del comienzo de las obras.
En la planta baja y a la entrada de la muestra podemos ver dos colosales figuras de ángeles lampadarios que miden algo mas de dos metros de altura, realizados en madera tallada, policromada y estofada. Su autor es Cayetano de Acosta y la fecha de ejecución está entre los años 1771 y 1779. Observamos que algunas partes que faltan no se han repuesto. Esto se ha hecho intencionadamente, porque se trata de restaurar lo existente, no de reponer, salvo casos excepcionales, siguiendo la política establecida por la Consejería de Cultura.
San Fernando
Cuando vemos que una obra esta hecha entre una fecha y otra posterior (por ejemplo 1771- y 1779), es porque no se sabe la fecha exacta, y en esas fechas se realizaban inventarios, entonces la obra no estaba inventariada en la primera fecha y sí en la segunda
Ya en la sala de exposiciones, nos explica nuestro profesor y guía José Luis Sedano, que hay cinco núcleos, los cuatro primeros son cronológicos, y el quinto dedicado a la Virgen de las Aguas.
El primer núcleo está dedicado a la ornamentación del primer templo durante los años 1248 al 1590. Hay una figura de San Fernando similar a tantas otras de Sevilla que aunque no es propia de este núcleo (corresponde al núcleo 3), quizás quiera simbolizar el comienzo de esta iglesia como templo cristiano que fue cuando San Fernando conquistó Sevilla, que como sabemos fue en 1248. Es una escultura de 1,90 metros de altura, en madera tallada y policromada y estofada del año 1699 realizada por Antonio Quirós y Francisco Meneses Osorio
La primera pieza que corresponde a este núcleo es un libro Coral Oficio de Difuntos de autor anónimo de fecha 1575-1599 y pergamino manuscrito e iluminado 64 x 43 x 6 cm
Cuz de Altar anónimo finales del XVI o principios del XVII plata repujada
Vasijas para los Santos Öleos de Hernando de Ballesteros “El Mozo” de 1576 –1600 plata repujada y cincelada de unos 40cm de altos. Un Cristo crucificado aónimo de 1500 escultura en madera tallada y policromada 58 x 51 y otro Cristo crucificado anónimo finales del XVI en marfil tallado y policromado 109 x 66
San Cristóbal
El segundo núcleo dedicado al programa manierista y abarca el periodo comprendido entre los años 1590 y 1697. La primera obra es una gran escultura de San Cristóbal de Martinez Montañés, de los años 1597-98 en madera tallada policromada y estofada de 2,15 metros de altura. Los atributos son del siglo XVII de plata repujada y de autor desconocido.
A continuación hay una pintura de Santa Maria Magdalena de Pedro Camprobín Passano, de los años 1632-1634, es un óleo sobre lienzo de 163 cm de alta.
Después vemos un relieve, la Adoraciónde los Pastores de madera tallada y policromada de Juan de Oviedo y de la Bandera de 2,34 metros y del primer tercio del XVII. A la figura del Niño Jesús le faltaban los dos brazos que le han sido repuestos. Esta es una excepción a la norma que hemos indicado de reparar y no restaurar.
La Resurrección que vemos a continuación, también es de Juan de Oviedo, y también es un relieve en madera tallada y policromada de 2,42 m, del primer tercio del siglo XVII
El núcleo tercero se dedica a la reconstrucción ornamental, y va desde 1679 a 1712, y la primera obra que encontramos es un óleo sobre tabla, de un Ecce Homo de autor anónimo flamenco de finales del XVI ó principios del XVII de 85 cm de alto.
Seguidamente vemos una escultura en madera tallada, policromada y estofada de la Inmaculada sobre una peana. Es del año 1699 y tiene una altura de 151 cm
A continuación hay un par de bandejas petitorias de plata repujada, del siglo XVII de casi medio metro de diámetro realizadas por Nicolás de Cárdenas, seguidas de un Relicario de Santa Bárbara de 1704, de plata bañada en oro y cristal de roca de autor anónimo y de 46 cm de altura
Posteriormente contemplamos una pintura de gran tamaño al óleo sobre lienzo de San Millán, en la batalla de Simancas de 291 cm atribuida a Sebastián de Llanos Valdés de la segunda mitad del siglo XVII.
En la pared de enfrente hay dos fotografías de sendos cuadros de pintura al óleo sobre lienzo de las cabezas decapitadas de San Juan Bautista y San Pablo de Sebastián de Llanos Valdés del año 1670 de 82 x 53 cm. No podemos contemplar los originales que están prestadoa temporalmente a una exposición de Granada.
El núcleo cuarto abarca los años 1712 a 1852 y está dedicado a la decoración barroca.
Llaman la atención dos bustos sobre relicarios de San Isidoro y San Leandro con capa pluvial de autor desconocido y del siglo XVIII de madera tallada policromada y estofada de unos 50 cm de altura. En la capa pluvial de San Isidoro y a ambos lados del pecho están representados San Pedro y San Pablo. Igualmente en la capa de San Leandro están pintadas figuras de San Andres y Santiago. Las mitras están hechas por Juan de Amores a principios del siglo XIX y miden algo mas de 36 cm. Los relicarios están realizados por Tomás Sánchez Reciente en 1753 con madera y plata repujada y tienen una altura de 1,25 metros.
Santa Ana enseñando a leer a la Virgen Niña
A continuación hay una cruz procesional de platería, realizada por Luis de Acosta y Diego Gallego entre finales del XVII y principios del XVIII, fabricada con plata cincelada y sobredorada, cobre dorado y cristal de roca.
Un Arcángel San Miguel de autor desconocido del siglo XVII, le sigue a continuación. Es una escultura en madera tallada y telas encoladas, estofada y policromada 167 x 82 x 62 cm.
Como en muchas iglesias de Sevilla, también hay una pintura de la Virgen de la Antigua, de Juan Ruiz Soriano, de la primera mitad del siglo XVIII, es un óleo sobre lienzo de 1,63 x 93 cm , que en la restauración se ha visto que está realizada sobre otra pintura.
La siguiente obra es la Anunciación de la que se desconoce el autor, pero se cree que es discípulo o seguidor de Pedro Duque Cornejo, de la primera mitad de XVIII, es un relieve en madera tallada, policromada, estofada y plata de 201 cm de alto por 114 de ancho por 42 de fondo.
Después vemos una escultura de San Jerónimo, atribuida a Cayetano de Acosta, realizada entre los años 1771 y 1778. Tiene 67 cm de altura. Es de madera tallada policromada y estofada. Otra escultura de San Agustín de las mismas características y autor viene a continuación.
Después vemos un San Joaquín, de José Montes de Oca de 1714, que mide 1,14 m y está realizado en madera tallada policromada y estofada, así como otra escultura de San Pedro sentado, también de José Montes de Oca del año 1700 realizada como casi todas en madera tallada policromada y estofada de 117 cm de alta.
Calvario
En un ángulo de la sala, hay un conjunto precioso de dos figuras, es el de Santa Ana sentada, enseñando a leer a la Virgen Niña, también es obra de José Montes de Oca. Santa Ana mide de altura 150 cm y La Virgen 117. Es de 1714.
La última obra de este núcleo es una pintura al óleo sobre lienzo de San Pedro de autor desconocido, que mide 146 cm y está entorno a finales del XVII y principios del XVIII que en su mano derecha tiene un libro y en el mismo brazo colgadas las llaves.
El quinto y último núcleo está dedicado a la Virgen de las Aguas, y las piezas expuestas, en su mayor parte son del ajuar de la Virgen.
La primera es un manto blanco de autor desconocido del año 1803, de lamé de hilo metálico de plata, bordado en hilo metálico dorado con ornamentos e hilo de seda de colores de 308 x 400 cm.
Después hay una saya blanca de 117 x 228 cm, de las mismas características y fecha del manto blanco. El pecherín y mangas también son de las mismas hechuras y los zapatos además tienen suela de cuero y miden 23 cm con el talón descubierto.
El frontal del Altar, estáexpuesto en su posición vertical. Es obra de Diego Gallego y Eugenio Sánchez Reciente, de 1701 al 1756, de madera y plata repujada y cincelada con unas dimensiones de 336 x 102 x 7,3 cm
Finaliza la exposición con el libro de reglas de la Hermandad de la Aguas y un precioso Calvario, de autor anónimo del siglo XVIII con esculturas en alabastro y madera tras una vitrina de 174 cm de alto.
Diciembre 2007
PERSONAJES SEVILLANOS. EL SALVADOR II
Antonio Quirós Figura en madera de San Fernando 1699
Cayetano de Acosta Angeles lampadarios del salvador 1771-1779
Cayetano de Acosta escultura de San Jerónimo 1771-1778
Diego Gallego Cruz procesional de platería finales del XVII y principios del XVIII. Frontal del Altar de la Virgen de las Aguas
Eugenio Sanchez Reciente Frontal del Altar de la Virgen de las Aguas
Francisco Meneses Osorio Figura en madera de San Fernando 1699
Hernando de Ballesteros “El Mozo” Vasijas para Santos Oleos 1576-1600
José Montes de Oca Escultura de San Joaquín de 1714 y un San Pedro sentado de 1700
Grupo de figuras deSanta Ana enseñando a leer a La Virgen Niña de 1714
Juan de Amores Mitras de los bustos de San Isidoro y San Leandro a pricipios del XIX
Juan de Oviedo y de la Bandera Relieve en madera de la Adoración de los Pastores
primer tercio del XVII. Relieve de la Resurrección primer tercio del XVII
Juan Martinez Montañés Escultura de San Cristóbal 1597-1598
Juan Ruiz Soriano Virgen de la Antigua ,primera mitad de XVIII
Luis de Acosta Cruz procesional de platería finales del XVII y principios del XVIII
Nicolás de Cárdenas Dos bandejas petitorias de plata repujada del XVII
Pedro Camprobín Passano Pintura de Santa María Magdalena 1632-1634
Sebastián de Llanos Valdés Cuadros de las cabezas decapitadas de San Juan Bautista y San Pablo de 1670. Un cuadro de San Millán en la Batalla de Simancas 2ª mitad del XVII
Tomás Sánchez Reciente Relicarios de San Isidoro y San Leandro en 1753
IGLESIA DE EL SALVADOR
El último viernes de octubre, visité por segunda vez en un año las obras de restauración de la iglesia del Salvador de Sevilla, llevándome una grata impresión sobre la marcha de las mismas.
El estado del templo en los últimos años era lamentable, dándose el caso de la caída desde el techo de una piedra de unos cinco kilos de peso. El día cuatro de marzo de 2003 se iniciaron las obras de restauración integral del edificio, y se estableció un plazo de cinco años para la culminación de las mismas
En sus comienzos, allá por los años 829-830 se estableció la primera mezquita mayor de Sevilla, (la mezquita de Ibn Adabbas, que debe este nombre al cadí de la ciudad que dirigió las obras, Umar Ibn Adabbas), unos trescientos cincuenta años antes que la Giralda, y cuando Fernando III conquista Sevilla en el año 1248, la mezquita se consagra como colegial cristiana. En 1671 se derribó la colegial medieval, construyéndose en 1712 la actual iglesia Colegial del Salvador, que en el año 1852 se constituye como parroquia.
Fachada principal
Uno de los problemas más importantes que afectaban al edificio era la humedad, por lo que se decidió levantar el suelo y excavar hasta una profundidad de cinco metros. La excavación dio lugar a unos hallazgos verdaderamente importantes, como lo son más de cien tumbas en varias capas establecidas ordenadamente. Después de levantar todas esas fosas, se descubrió el suelo de la antigua colegial del siglo XVI, así como algunos pilares de la mezquita de Ibn Adabbas, y en los laterales algunas criptas, hallándose en la denominada de San Cristóbal una enorme cantidad de esqueletos amontonados, siendo en su mayoría de niños de corta edad. Se descubrió también la causa de la humedad, que es una inagotable corriente subterránea de agua.
Después de tres años y medio de comenzadas las obras, se ha repuesto el suelo del templo que es a su vez techo de la antigua mezquita que se conserva en el estado en que se encontró, el agua subterránea se extrae permanentemente, y se ha construído una escalera de acceso al subterráneo que constituye el suelo de la antigua mezquita.
En esta segunda visita, se accede al edificio a través de la Sacristía Baja, a continuación está la Sacristía Alta, que queda a la izquierda del Retablo Mayor, y siguiendo por detrás de este, se llega a una sala denominada Archivo Osteológico que está a la derecha del retablo Mayor, e inmediatamente detrás del retablo del Amor. Este archivo, tiene su pared derecha llena de modernos armarios de madera con muchas cajas de plástico perfectamente etiquetadas, que contienen los huesos encontrados en el suelo, y en la cripta de San Cristóbal, y en el futuro será sala de estudio de todo este contingente.
Patio de las abluciones
Ya se ha establecido, que en el siglo XVIII, la estatura media del hombre era de 1,65 metros, y de la mujer de 1,54; que los esqueletos infantiles se debieron a epidemias que azotaban la ciudad y que esos niños pertenecían a la casa Cuna, que entonces estaba en lo que fue el cine Pathé de la calle Cuna, así como las enfermedades que causaban la muerte a los adultos, observándose además el mal estado de las dentaduras; etc.
Al salir al templo propiamente dicho, impresionaba la luz, en contraste con la oscuridad de antaño. La piedra ha sido limpiada con un gel detergente que se aplica a la zona a restaurar, y después de actuar durante un tiempo, se retira dejándola completamente limpia.
Tumbas en el suelo
Por una estrecha escalera de caracol de 36 peldaños situada en el rincón de la izquierda de la puerta principal, accedimos a una balconada doble que por su parte derecha da acceso al coro, que actualmente está en construcción. Allí se pueden observar de cerca las vidrieras, que aunque han sido limpiadas parcialmente, están pendientes de restauración y sustitución de muchos elementos. Estas vidrieras fueron donadas en el año 1870 por los duques de Montpensier, padres de la reina Mercedes de Orleans que fue la primera esposa del rey Alfonso XII.
Creo que cuando la restauración esté acabada y la iglesia amueblada, se habrá realizado una gran obra de la que nos podremos sentir orgullosos
Octubre 2006